SEGUNDO CAPITULO DE DOLOR Y ANGUSTIA

                                        SEGUNDO CAPITULO.

.

En los asientos de primera clase, solo habíamos diez personas, los cinco guardianes, yo, una pareja y sus dos niños.

En voz baja le pregunté a Iván:

-Oye, Iván, me podías decir en lo que consiste ser una bruja?

-Bueno, Valeria, ser una bruja no es nada mas, hacer hechizos contra la gente, Gracias a las brujas los vampiros y Fantasmas, ya no están en guerra, la mayoría de los fantasmas, son pacíficos, pero solamente hay una raza de vampiros, que insiste en extinguirnos.-Me contesto.

Sabia de que raza hablaba Iván continúo:

-Hace, cuatrocientos años, las brujas hicieron un pacto con los vampiros, nosotros las dejábamos empaz, y ellas conjuraban un hechizo. Uno que muy pocas brujas pueden hacer, y que para nosotros los vampiros, es lo mejor que pudieron hacer, nuestro mayor sueño. Salir a la luz del sol.

Yo desde hace unos días tenía esa duda, yo me preguntaba ¿porque Nikolas no se quemaba cuando salía a la luz del sol?

- ¿que mas paso?-Pregunte ansiosa por saber más.

-Los vampiros, aceptamos, las brujas nos advirtieron, que ellas no podían hacer que todos los vampiros, salieran a la luz del sol. Que solamente a los vampiros más importantes se les daría ese honor, y que por generaciones, eso es lo que se haría. El ritual es único, Los fantasmas, se pusieron celosos, porque ellos nunca consiguieron, tener a las brujas a su lado. Pero lo que más les enfadada, era que para ellos era más fácil, matar a los vampiros en la luz del sol, ya que en la luz no podíamos reaccionar. Y ellos sabían, que en vez que nosotros quedáramos inmunes, eran ellos quienes se quedarían sin un arma poderosa. Así que, en ese momento, los fantasmas nos declararon la guerra. Solamente les falló una cosa, nosotros teníamos a las brujas de nuestro lado, así que las brujas hicieron un hechizo en el cual, los fantasmas no podrían salir, solamente se quedarían en el lugar donde murieron, de allí las historias de que los fantasmas se aparecen en el lugar en donde murieron. Los fantasmas no pudieron soportar estar encerrados tanto tiempo, y juraron que mantendrían la paz con nosotros y las brujas. Las brujas decisieron el hechizo. Y cuando nosotros pensamos que habría paz, los Xalei, decisieron el juramento, y se escondieron debajo de la tierra, donde los fantasmas mas poderosos siguen ahí , los Walei ellos, también rompieron el juramento, pero ellos de tanto tiempo estar encerrados se volvieron locos y se quedaron a la vista de los vampiros y las brujas, así que las brujas pusieron un hechizo a los Walei, los walei se quedarían aquí en este mundo vagando para siempre. La única raza que no rompió el juramento son los Chalei, pero ya que ellos no lo rompieron los Xalei pensaron que los Chalei se podrían unir con nosotros, y ahora ya están extintos. Desde, esa época, los Xalei, y los vampiros, estamos en guerra pacifica.

-Umm… Gracias Iván, pero tengo una última pregunta ¿Cómo se hace un ritual de iniciación?

-Comúnmente se llaman Gateway, un grupo de neonatas brujas, se reúnen en un círculo que hacen las brujas de agua. Las brujas neonatas se agarran de las manos y juran que les serán fieles a su raza pase lo que pase. -Después las brujas neonatas, se quitan su capucha se miran a los ojos mutuamente y dicen que estarán unidas por los elementos, y que hoy y siempre serán brujas de agua

Al, final, cada bruja neonata, pasa con su nueva, mentora, ella les dará su nuevo nombre, y pues después me parece que hacen una fiesta. Con todas las brujas, de esa ciudad.

-Wau, debe de ser genial, presenciarlo-Murmure.

-Pues, créelo, tu vas hacer parte de él- Me dijo Iban.

-¿Cómo es eso del nuevo nombre?-Pregunte.

-Cuando te conviertes en bruja de agua, comienzas una nueva vida, y te cambian tu nombre comúnmente es parecido al tuyo así que no te preocupes- Me respondió Iván.

Después de eso ninguno de los dos hablo. Me quede dormida,  cuando llegamos, Iván me susurro:

-Valeria, ya llegamos, Valeria.

-Umm… Am- Dije, mientras me despejaba.

-Vamos, a ver te ayudo-Me dijo, y me agarro del brazo.

-Gracias- Murmure un poco sonrojada. Que, agarrara  a un tipo como Iván, iba más allá de mis expectativas. Pero me acorde, que estaba en china por Nikolas “No te distraigas” Me dije a misma.

Ya, afuera del aeropuerto, una limosina, nos estaba esperando. Todos nos miraban, ja, me sentía un poco confortable.

El trayecto, duro dos horas, cuando me desespere le pregunte a Iván.

-¿Iván? ¿A dónde vamos?

-Vamos, a la mansión, de las brujas, de agua. Ahí ellas te entrenaran, para ser bruja, de agua- me respondió Iván, pensativo.

-¿Durante cuánto tiempo- pregunte aunque ya savia la respuesta para mí era mucho tiempo

-Durante, un mes. El, primero de Mayo, será tu primer día de bruja, ellas celebran ese día para hacer los rituales de iniciación o como ellas lo llaman Esa noche  Samhian, y saludan el amanecer con feliz año Novo- Me contesto Iván.

Cuando, llegamos a la mansión, me quede en shock.

La mansión (si a eso se le puede llamar mansión ya que podría pasar fácilmente como castillo) de color Azul- Claro. Con un enorme jardín, verde, con árboles, frutales, rosales, todo tipo de arboles o arbustos. Estaba rodeada, de cerjas, tan lindas. Que parecían de oro(a lo mejor son de oro ¿Quién sabe?). Todo era hermoso.

Entramos, por la reja enorme color negro con incrustaciones de oro y plata, no había nadie que nos abriera, pero después de unos instantes la reja se abrió sola.

Cuando, la limosina, se paro en la puerta de la entrada, Iván, y los otros cuatro guardianes, salieron y Iván me ofreció su brazo.

-Gracias- le dije cuando Salí de la limosina.

Nos encaminamos a la puerta, primero los cuatro guardianes, y atrás Iván y yo.

El guardián, Peter. Toco la puerta.

Después de unos minutos, se abrió la puerta lentamente. Apareció, una señora como de unos cuarenta y tantos años, con el pelo negro, ondulado, labios delgados, ojos azules, como el mar. Y tan alta, que tenía que alzar, la cabeza, para verla.

-Buenas, tardes dama negra. Somos…- Empezo a decir Peter pero la dama  negra lo interrumpió.

-Yo sé quiénes son, así que tu eres Valeria Gómez? –Preguntó.

-Sí, Señora- Le conteste.

Ella frunció el ceño y dijo.

-No me digas, señora. Yo soy la Dama negra, del todo continente. Así que desde ahora me vas hablar con más respeto.

-Mmm… Si dama  negra- Le conteste, con fingido respeto.

-Lo siento. Dama negra. Pero ella apenas hace unas horas que sabe que es una bruja de Agua. Apenas está aprendiendo.

-Lo sé, Guardián. Y como se lo dije a Emerick, solo aceptare,  a la señorita Valeria y a un solo guardián.-Nos comunico ella.

-Eso, nos dijo Emerick, y él me puso a cargo a mí. Los otro cuatro guardianes, se van aquedar, en un hotel, de por aquí, por si los necesitamos.-Le contesto Iván.

Así que iba a ver a Iván todos los días?

-Bueno, mañana empezaran las clases, Así que no perdamos tiempo- Y en ese instante a parecieron dos tipos altos y fuertes.

-Ellos, ayudaran con el equipaje de la señorita Valeria, aunque veo que solo vamos a necesitar a uno, no lleva más equipaje?- Pregunto.

-No, tuve tiempo de llevar más cosas.-Le conteste.

-Ya que acaba de llegar le daré permiso para que se valla de compras. Se ve que lo necesita.-Dijo la dama negra, y después cerró los ojos, y desapareció.

-¿Cómo lo hizo?-Pregunte.

-Cosas de brujas, pronto tú lo harás también- Contesto Peter, mientras subía a la limosina. Cuando todos nos subimos, Arranco la limosina.

-A ¿Qué centro comercial vamos?-Pregunte emocionada.

-Vamos, a un centro comercial, de china. Pequeño pero bien equipado, a la última moda- Respondió Adriel.

-Ah, pero no tengo mucho dinero- Dije con voz preocupada.

-No te preocupes Valeria, Emerick nos dio, una tarjeta de crédito. Dijo que la ocupáramos para lo que sea. Y también me dijo que te la diera a ti. Es tuya.-Dijo Iván entregándome una tarjeta Dorada.-Esta a tu nombre.

-¿A mi nombre? Nunca he tenido una tarjeta, mis papas nunca lo quisieron.

-Pues ahora tienes, una, puedes gastar en lo que quieras-Dijo Peter.

Dylan y jemes no hablaban ¿Serán los años que llevan trabajando de guardianes? Está claro que James no me soportaba, solo me mira con cara de odio. ¿Pero qué demonios le hice?

El centro comercial, en sí y como lo dijeron era pequeño, tenía dos pisos, era blanco y la mitad del centro comercial estaba hecho de vidrio. Era fantástico. En la entrada se leía CENTRO COMERCIAL “SAMALOCHI”.

Ya, ya vamos- Les grite impacientemente.

Bajamos de la limo. Y caminamos Asia la entrada. Todo era maravilloso.

Al cabo de una hora y media todos los guardianes estaban fatigados. Habíamos recorrido cada tienda del centro comercial. Me compre de todo, jeans, blusas, zapatos, bolsas, perfumes, accesorios para el cabello, suéteres, en fin todo.

-Ya vámonos, ir de compras cansa más, que el entrenamiento-Se quejo Peter jadeando un poco.

-La verdad, si no se como a las mujeres les encanta ir de compras, mira Valeria ni se nota cansada-Dijo mirándome

-No sean niños, ya vámonos.

Llegamos, todos agotados, hasta yo estaba a punto de quedarme dormida.

-Ya sabes, Iván, si nos necesitan nos hablas, adiós-Y con esa frase, nos dejaron en la puerta con todo y bolsas. Iván toco la puerta y abrió una muchacha simpática.

-Hola, señorita Valeria, pasen-Nos dijo sonriéndonos y mas a Iván- Sus cuartos están preparados. Deja ahí las bolsas en un momento alguien las subirá.

La muchacha nos condujo, al segundo piso, mi cuarto era el del fondo, el último.

-Señorita Valeria este es su cuarto, esperamos que sea de su agrado, en dos horas vendrán por usted, para llevarla al cuarto de cena. Ahí se encontrara con todas sus compañeras, y maestras, compermiso- Con eso se fue con Iván. Iván solamente me dirigió una mirada insatisfecha.

Mi cuarto, era ni grande ni chico, era normal, nada comparado con el mío. Pero era precioso, Azul, como toda la casa, con una cama matrimonial, blanca, con una ventana, que da vista al jardín principal, un closet, grande, un baño, con un inodoro, lavamanos, y una bañera, ah y nos olvidemos de la televisión, el teléfono y la pequeña nevera.

-Pues si que quieren que nos sintamos a gustas-Murmure mientras giraba la llave de la bañera.

Tac, tac. Alguien toco la puerta.

-Adelante.

-Buenas, noches, señorita le traigo su equipaje-Dijo un chavo, realmente guapo y simpático, cargado de mis bolsas.

-Gracias, déjalas, en el suelo-Le indique el me sonrió y las dejo en el suelo.

-De nada, señorita Valeria.

-Dime Valeria, no me gustan las formalidades, y tu cómo te llamas?

-Me llamo Xavier, y voy hacer tu sirviente, en tu estadía aquí-Me dijo.

-Ah, ok gracias, te puedes retirar-Le dije.

Xavier me miro por última vez y se fue.

No sabía que ponerme, iba a ver brujas y brujas neonatas. ¿Cómo se supone que debía vestirme? Asimile unos minutos mientras el agua se calentaba. Y llegue a la conclusión, de que ¿Qué me importaba lo que dijeran de mí? Así que me puse unos pantalones entubados negros, y una blusa azul-marino  ajustada, y con escote, unos zapatos negros de tacón, bajo. Y me puse un collar, de un sol, y me cepillé mi pelo cuidadosamente, y me puse mis dos broches color blanco.

Faltaba media hora, para que vinieran por mí, así que acomode mi ropa, en el closet, a afortunadamente, todo cupo.

Me puse muy nerviosa, ¿Qué debería decir? ¿Les debía decir brujas? O tal vez ¿debería opinar acerca de la brujas? O les molestaría? O…

TOC, TOC, TOC.

-Adelante- Dije.

Apareció Xavier, sonriendo como siempre.

-Ya es hora de la cena, Valeria-Dijo Xavier tendiéndome una mano.

-Gracias-Le dije mientras salíamos de mi cuarto.-Oye Xavier, yo no sé mucho de brujas, así que ¿Cómo debo de comportarme?-

-Primero, cuando entres al salón, saluda a la dama negra, con respeto, le dices” Buenas noches dama negra” y te inclinas, después ella te presentara a los presentes, y después ella te presentara a ellos, y por ultimo ella te indicara donde sentarte, después comes, lo que te sirvan conversas, con quien quieras, y ya al final. Se retira la dama negra, ella es la que se puede ir primero nadie más, después los demás se pueden ir cuando quieran-Me explico.

-Gracias- Le dije.

El ya no pudo responderme, porque en ese momento estábamos parados enfrente de una puerta enorme color madera.

-Adiós-Me dijo y se fue.

Hola. perdón por el retraso pero ayer fue mi cumpleaños y estuve un poco ocupada. espero y les aiga gustado BYE.